Piccolo está meditando frente a una cascada y aparece Gohan con Haiya Dragon explicando que le ha enseñado a bailar al son de sus silbidos. Se pone a demostrarlo, pero por alguna razón a Piccolo le molesta y le hace callar, percatándose inmediatamente después que se aproxima una extraña presencia.
En la Capsule Corp el Dr. Brief comenta con Bulma que ha descubierto en su telescopio un enorme meteorito que podría destruir toda la Tierra dentro de poco. También informa que no pueden derribarlo con misiles puesto que al parecer contiene vida dentro. En la ciudad ha empezado a cundir el pánico mientras que Gokuh y Kulilin van a su encuentro para intentar desviarlo usando ondas energéticas. El intento resulta fallido, pero sorprendentemente, cuando el meteorito está a punto de alcanzar al planeta, cambia de rumbo y pasa de largo.

       

Todos se han salvado, pero algo pasa. Un extraño aparato ha aterrizado en la ciudad y de él empieza a salir una especie de ejército formado por soldados enfundados en escafandras que reclaman el planeta Tierra en nombre de su rey, el todopoderoso Slug. Tras esto empiezan a atacar a la población, pero Gohan les sale al encuentro derribándolos uno a uno. Dentro de la nave Slug está rodeado de sus guardia personal, los guerreros Angira, Dorotabo y Medamacha, y se percata de que Gohan lleva una Dragon Ball en su gorro. Esto hace que salga de la nave y se la quite para después, usando la telepatía, descubra de Bulma que hay seis bolas más y que se pueden encontrar con el Radar. Inmediatamente ordena a sus soldados que las busquen y, con ellas en su poder, pide a Shenron que le devuelva la juventud.

       

Ahora, con la fuerza de la juventud, informa que su siguiente paso es transformar la Tierra en un enorme transbordador espacial, pero lo primero que necesita es ocultar el Sol, pues a sus soldados les dañan los rayos del brillante astro. Para hacer esto lanza una especie de aparato dispersor a la atmósfera, que cubre todo el cielo de una espesa nube que impide el paso de la luz. Esto provoca que la Tierra se congele poco a poco.
Sin embargo Gohan no se da por vencido y vuelve a la nave, apareciendo poco después Piccolo. Los soldados no pueden hacer nada contra ellos, por lo que llaman a la escolta personal de Slug. Así, Dorotabo comienza a luchar contra Piccolo, aunque demuestra ser inferior a nuestro verde amigo y es derrotado fácilmente. Por otro lado Medamacha ataca a Gohan absorbiéndole la energía. Piccolo se aproxima a ayudarle, pero Angira le detiene y lo noquea.

       

Cuando están a punto de rematarlos aparecen Gokuh y Kulilin. De forma rápida Gokuh se deshace de los dos guerreros y se dispone a enfrentarse contra Slug, que resulta ser muy superior dándole una paliza de muerte. Extrañamente, cuando Gokuh está a punto de caer desfallecido surge de él un resplandor y recupera de pronto las fuerzas apaleando sin piedad a Slug (¿un Super Saiyajin...?).

       

Parece que la batalla está decidida, pero Slug vuelve a sorprenderle descubriéndose como un habitante de Namek y usando la técnica del Kyodaika para aumentar de tamaño, dándole otra vez la vuelta al combate. Ahora será Piccolo quien salve a Gokuh cayendo él prisionero de su paisano. Pero tiene un plan, y lo primero que hace es arrancarse las orejas para después pedirle a Gohan que repita los silbidos que le había enseñado mientras meditaba. Gohan no sabe por qué, pero lo hace y Slug parece volverse loco al oirlo. Kaioh Sama explica que al parecer los habitantes de Namek son muy sensibles al sonido proveniente del silbido humano.

       

El plan de Piccolo no ha resultado definitivo, pero le ha dado tiempo para que ceda la poca energía que le queda a Gokuh, el cual usando la técnica de Kaioh Ken atraviesa a Slug. Ahora solo queda erradicar la nube que oculta al Sol. Gokuh marcha hacia el aparato dispersor para destruirlo, pero Slug aun no ha muerto y le persigue en un último y desesperado ataque. Gokuh le ve venir y concentra la energía del sol en su puño, creando una Genki Dama, que se lleva por delante tanto al aparato como a Slug, desapareciendo la amenaza de una vez por todas.